Dead in the street. Capítulo 6: The infection in the church


                          DEAD IN THE STREET


Capítulo 6: The infection in the church

Unos se dedicaban a disparar y otros a curir con bancos las maderas por donde podían entrar, después de unos minutos los ‘’caminantes’’ entraron a la iglesia, y nos quedaba solución, hasta que Noelia dijo:
-Adrián hay una escalera –dijo- vamos a ponerla en aquel hueco y podremos saltar por la ventana.
-Vale- dije-
-Coged la escalera y ponerla ahí ¡¡¡ rápido!!!- gritó Noelia
Así Eduardo, Ima y Daniel fueron rápidamente a por la escalera y la pusieron donde estaban las ventanas, justo al ponerla entraron los ‘’caminantes’’.
-¡¡¡Corred!!!- grité
Dicho esto, fuimos todos a la escalera, cuando estábamos arriba Eduardo me dijo:
-Adrián, saltaré por la ventana y cogeré el coche y os subiréis rápido
-Vale, pero ten mucho cuidado-dije- nosotros les distraemos.
Rompimos la ventana, y Eduardo fue a por el coche. El coche no estaba muy lejos, pero estaba plagado de ‘’caminantes’’, con esperanzas creimos que volveria, mientras los demás disparaban, dejé un momento la pistola y le pregunté a Noelia:
-¿Cres que volverá?- pregunté a Noelia-
-Sí, Eduardo es fuerte- respondió- ahora cállate y dispara.
Cuando dijo esto, cogí de nuevo la pistola y disparé a los ‘’caminantes’’, tras cinco minutos de angustia, vimos el coche, era Eduardo, bajo la ventanilla y gritó.
-¡¡¡Subid corred!!!- girtó con fuerza-
Cuando oímos su voz, fuimos rápidamente a la ventana y saltemos, el último que saltó fue Jorge, que casi le muerde un ‘’caminante’’, pero pasaron de lado de Jorge, era muy extraño, antes de subir le mordieron en la pierna a José, y se quedo gritando en el suelo, no pudimos hacer nada.
Cuando subimos al coche, Eduardo arrancó rápido, y atropello a ‘’caminantes’’, fuimos rumbo a un lugar seguro. Ya en un lugar seguro (bueno más que el otro), les pregunté a los demás:
-¿Pero como es posible que ayer no hubiera ningún ‘’caminante’’, y hoy casi morimos todos?
-Aunque parezca un disparate- dijo Ima- creo que alguien los guarda.
-No digas tonterías- dijo Cristina- ¿Cómo los va a poder coger?
-Usará cebo, o algo-contestó Ima-
-O eso o algo raro está pasando aquí- añadió Noelia-
-Bueno, vamos a desayunar-dijé- ¿Cuánto tenemos de comida?
-Ya casi no tenemos- contestó Dani-
-¿Cómo es posible?-pregunté- teníamos bastantes para semanas
-Pues no se- contestó- habrá que buscar-
-Yo no me pienso mover de aquí hasta que nos ataquen los ‘’caminantes’’-dijo Eduardo- bastante hemos pasado ya-
-Tiene razón, yo tampoco me voy a mover de aquí-dijo Jorge-
-Haremos grupos- dijé- un grupo se dedicará a buscar refugio cercano por las casas y el otro buscará provisiones, ¿entendido?
-Sí, pero vamos a desayunar- contestó Ima-
Desayunemos mayormente verduras, y un poco de galletas.
Ya por la tarde, hicimos los grupos: Ima, Noelia, Dani y Jorge hirian a buscar refugio, mientras que: Eduardo, Cristina y yo hiriamos a buscar provisiones.
-Cuando anochezca nos encontraremos aquí- dije-
Fuimos hacia el este, y encontremos casas, con provisiones: agua y comida mayormente. Al anochecer volvimos donde dijimos, pero no había nadie.
-Vamos a esperar-dijo Eduardo-
Tras veinte minutos esperando, no apreció nadie.
-¿Dónde coño estarán?- pregunté-
-Como si lo supiera -contestó Cristina-
-¿Los buscamos?-pregunté de nuevo-
-Vale vamos a coger las armas que han dejado en el coche- dijo Eduardo-
Cuando fuimos al coche, cogimos las armas y fuimos rumbo a buscar a Ima, Noelia, Jorge y Dani.

1 comentarios:

  1. Unknown dijo...

    Me encanta tu novela o como lo qieras llamar,pero me encanta,sigue asi qe escribes muy bieeen!y da la casualidad qe hay una qe se llama como yo buajaaj(:

Publicar un comentario